Capilla San Luis

Había una vez un chalet, no lejos del Río de la Plata, que escondía una caldera y uno de los primeros pozos de agua que abastecían a la ciudad de Buenos Aires. Corría el año 1896 y desde la linda casita de ladrillos a la vista y techo de tejas francesas, se podía ver a campo traviesa la iglesia “Redonda” de Belgrano.

Más de un siglo después, ese chalecito, aunque algo arruinado, todavía quedaba en pie después de la demolición del entorno de galpones y playones que pertenecieran a Obras Sanitarias. Se estaba haciendo un nuevo parque, sobre Monroe al 1000, casi Figueroa Alcorta. La casita ya tenía como forma de capilla y no había al parecer mejor destino, ni una finalidad más congregante de los vecinos del barrio, que erigir allí un lugar sagrado.

El Arzobispado de Buenos Aires y más de mil vecino, tras varios meses de gestión, lograron convertirlo en capilla porteña y hoy se levanta en honor a san Luis, el piadoso rey medieval de las Galias.

Título de propiedad en consignación del Arzobispado de Buenos Aires, Parroquia Nuestra Señora de las Mercedes

Ubicación

 Cómo llegar: Colectivos 42, 107, 130. 

Horarios durante el año

Misa dictada en idioma francés todos los domingos a las  11.15 hs.